
Las ideas fluyendo constantemente pueden ser algo muy útil, pero cuando no paran y fluyen sin dirección también llegan a convertirse en tus enemigas. Enfocarnos en una idea a la vez y tener la capacidad de poner pausa a las demás no siempre es fácil y las emociones suelen ayudar a que las cosas se salgan de control.
Entender cómo funciona nuestra mente y cómo podemos manejar el estrés o la ansiedad que nos genera es posible, solo hay que ir un día a la vez. Aquí te comparto estrategias para esos momentos en los que pareciera que la mente te traiciona, para poder hacer las pases con esa vocecita que vive dentro de ti.